viernes, 18 de octubre de 2013

La sabiduría de las hormigas

Ve a la hormiga, ... mira sus caminos y se sabio. Proverbios 6.6.

          Un día mientras almorzaba, noté algunas hormigas, las cuales parecían estar bien interesadas en algunas migajas que se habían caído de mi sándwich. Me fijé cómo una hormiga se adueñó de una pequeña migaja y salió corriendo. En poco tiempo, ya se habían reunido varias hormigas para buscar más. Entonces me pregunté qué pasaría si yo les daba un pedazo mucho más grande que las hormigas. Dejé caer un pedazo más grande y en seguida pude ver que una una hormiga estaba tratando de arrastrar el pedazo, pero con poco éxito. Sin embargo, no se rindió, sino que prosiguió forcejando y halando. Poco después, vino otra hormiga y se unió a ella. Juntas, empezaron a arrastrar la migaja. Más tarde, dos más llegaron para ayudar con el proyecto. Ellas empezaron a empujar y la migaja se empezó a mover a buena velocidad. Y yo, sabiendo que la migaja era muy grande como para poder entrar en el nido de las hormigas, decidí seguir la procesión.
          Yo observaba, muy entretenido, mientras las primeras dos hormiguitas desaparecieron en el nido. De repente se detuvo la migaja. Luego, las hormigas que estaban abajo le levantaron e intentaron entrarla otra vez, aunque sin éxito alguno. Pero, ¿acaso se rindieron ellas? ¡De ninguna manera! Despedazaron la migaja y empezaron a transportarla poco a poco, hasta que terminaron y la almacenaron toda.
          Cuando todos cooperamos a una, podemos lograr mucho más de lo que cualquiera de nosotros hubiera logrado solo. Estamos relacionándonos con almas que van rumbo a la eternidad, y nuestra colaboración puede hacer una gran diferencia en el destino al que lleguen.
- Vernon, Troyer, Clarkson, KY

No mirando cada uno por lo suyo propio, sino cada cual también por lo de los otros. 
Filipenses 2.4   

0 comentarios:

Publicar un comentario

 

Blogger news

Blogroll

About